Estilo Minimalista en Diseño de Interiores

El estilo Minimalista en Diseño de Interiores busca crear espacios en los que cobran importancia las formas simples de la arquitectura, las estancias abiertas y despejadas con limpieza visual, el uso de los elementos estrictamente esenciales, la calidad de los materiales, las geometrías puras, las proporciones perfectas, la selección cuidadosa de muebles y objetos, y la calidad sobre la cantidad.

Es un estilo que logra el resultado estético que se plantea, al permitir que cada uno de los elementos que lo componen, como los arquitectónicos, mobiliarios y objetos decorativos muestren su propio discurso, y a su vez se integren con armonía perfecta en un único concepto. Por lo que materiales, acabados y formas son tratados con delicado cuidado, precisión y sentido, ya que serán los encargados de dotar a los espacios del carácter y la personalidad que impregna este estilo.

No se trata de vaciar los espacios, sino de crear un concepto de diseño conforme a los principios del minimalismo y a las preferencias de quienes lo van a vivir, en el que solo encuentren lugar los elementos que respondan a él, que armonicen entre sí y que formen una unidad.

De estos criterios es que se vale el Diseño de Interiores Minimalista, para generar las sensaciones de amplitud, luminosidad, elegancia, orden, confort, armonía, equilibrio y serenidad que nos ofrece.

Este estilo surgido en arquitectura en Europa en la década de los 60, es perfecto para crear ambientes modernos, sofisticados, depurados y elegantes.

Los espacios minimalistas se caracterizan fundamentalmente

  • Por el protagonismo que tiene el espacio en sí mismo, su estructura y su arquitectura, de forma tal que pasa a ser parte importante del diseño de interiores. Es el fondo al que están anclados visualmente, en proporciones, armonía y equilibrio perfectos, el resto de los elementos que componen un diseño de interiores de este estilo.
  • Por la funcionalidad. Este estilo se caracteriza por crear espacios despejados y abiertos, en los que se colocan las divisiones y muebles estrictamente necesarios, distribuidos de manera que permitan una circulación fluida y sin obstáculos a través de todas las estancias.
  • También los caracteriza el uso de colores neutros como blanco, negro, gris y beiges, así como la creación de espacios monocromáticos.
  • El empleo de materiales de buena calidad como en maderas, piedras naturales por ejemplo el mármol, vidrios y metales, es otra de sus características
  • Así como las texturas delicadas, las superficies lisas y esmerados acabados.
  • También destaca en este estilo el máximo aprovechamiento de la luz natural, siempre que es posible se colocan grandes ventanales que creen la sensación de continuidad entre el ambiente interior y el exterior.
  • Por el empleo muy controlado de los objetos decorativos y ornamentos, en este caso se colocan estrictamente los que se entienden necesarios para el conjunto del diseño.
  • Y por el predomino de formas geométricas puras, por la simplificación estética y formal y por las simetrías.

Consejos que te ayudarán a capturar la esencia de este funcional estilo, los que te servirán de guía perfecta.

Antes de entrar a detallarte los pasos a seguir para diseñar una casa al estilo minimalista te recomiendo que durante todo el proceso de planificación de tu diseño te mantengas al tanto de tres elementos esenciales, de la luz, los materiales a emplear y las formas, y te asegures de que cada elemento que vayas a colocar tenga un propósito específico y de que forme parte de la estética general del espacio.

  • Debes empezar por revisar la distribución de los espacios de tu casa: Asegúrate de que tu casa te permite un recorrido fácil y natural por ella, y si no fuera así identifica esos elementos que lo entorpecen. Te aconsejo que estudies la planta de distribución de la misma y mires si tienes la posibilidad de cambiar de lugar o de quitar esas paredes o puertas que obstaculizan el paso, para así conseguir la sensación de amplitud, luminosidad y fluidez que se busca. Eliminar las paredes innecesarias ayuda a aumentar la entrada de luz natural y la conexión con el exterior. Si tu casa tiene alguna vista atractiva hacia el exterior, o la posibilidad de crearla, utilízala como elemento focal. Coloca los muebles de forma tal que dejen libre las zonas de circulación y que no obstruyan las entradas de luz natural.   Para lograr este estilo en diseño de interiores, lo primero es conseguir que la distribución de los espacios de tu casa sea funcional, el objetivo es crear espacios diáfanos y limpios donde la circulación y la luz fluyan libremente.
  • Continúa tu diseño trabajando la Iluminación: Identifica los puntos de entrada de luz natural que tiene tu casa y prioriza y maximiza su paso, la abundancia de luz natural hace que los espacios parezcan más amplios y limpios y que sean estancias relajadas. En cuanto a la iluminación artificial utilízala preferiblemente de forma indirecta, oculta y discreta, de forma que consigas una iluminación suave y difusa para así crear un ambiente más armonioso y sereno. Lo más usual es no usar luminarias colgantes, para que los techos se vean continuos y limpios, pero puedes colocarlas intencionalmente para completar el conjunto del diseño o para introducir un énfasis. Además, moderadamente, puedes optar por lámparas de pie o de mesa las que son muy recomendables en este estilo ya que crean una iluminación ambiental muy agradable.
  • Los colores son otro elemento importante a tener en cuenta: Escógelos dentro de una paleta de colores neutros, preferiblemente de blanco, negro, gris y beige, que son los más recomendados en el diseño de interiores minimalista, ya que crean una base sosegada y tranquila sobre la que los muebles y los objetos decorativos se destacan y resaltan por la belleza de sus materiales y sus formas. De esta paleta selecciona dos, como máximo tres colores y con ellos define cual  aplicar en paredes, en muebles, en los objetos decorativos y en los accesorios, también puedes optar por el monocromo, es decir por utilizar un solo color por ejemplo el blanco para paredes , muebles ,suelo y techos, en este momento también elige un color para hacer algún énfasis en el diseño, estos se utilizan de manera moderada para agregar interés visual y crear sutiles contrastes, el que puede ser del mismo color seleccionado pero con otra intensidad o de otro color como amarillo mostaza, verde botella y azul índigo, evita los estampados, te recomiendo que hagas esta selección de una vez para toda la casa. Si lo que quieres es conseguir una base cálida y acogedora puedes usar, por ejemplo, el blanco para paredes, suelo y techo, beige para mobiliario y marrones para hacer énfasis. Si quieres un resultado más sofisticado crea contraste con el color negro colocándolo en accesorios.
  • A la selección de materiales y texturas,  dedícales especial atención, estos deben ser de buena calidad, ya que en este estilo tienen un papel protagónico. Se prefieren los materiales como el acero, aluminio, piedra natural como mármol, hormigón, vidrio, cemento pulido, madera y cuero, todos con acabados perfectos y lisos. Puedes emplear la madera tanto en suelos como en revestimientos y en muebles si quieres aportar calidez natural a tu espacio, el mármol y el acero inoxidable para dar un aire elegante y moderno y aportar profundidad y personalidad, y el vidrio para lograr sensación de claridad, ligereza, y conexión con el exterior. Al igual que con los colores, te recomiendo que selecciones unos pocos materiales y acabados y que sean los mismos a emplear en todas las estancias de tu casa, esto te permite conseguir conexiones visuales y a crear una estética unificada en tu diseño. Añade texturas sutiles por ejemplo en alfombras y cojines para suavizar el ambiente y darle confort.
  • Mobiliario: Los muebles son los elementos principales en este estilo por ello no debes seleccionarlos ni colocarlos de manera aislada, sino creando una relación entre ellos, con el resto de los elementos y con el propio espacio que ocupan. Elige muebles funcionales, prácticos, de líneas depuradas y geometrías simples, de materiales de buena calidad, con superficies lisas, que luzcan por lo que son. Te aconsejo emplear muebles multifuncionales, con almacenamiento oculto y con tiradores invisibles. El mobiliario debe contribuir a la limpieza visual que nos plantea este estilo.
  • Los textiles. Con relación a las cortinas te aconsejo que las coloques únicamente si te son muy necesarias. Si es así hazlo de la forma más discreta posible como por ejemplo del mismo color de las paredes, aunque lo mejor es prescindir de ellas, una buena opción para ventanas son los estores enrollables. Para tapicería y cojines, utiliza telas lisas, sin ornamentos como bordados o flecos. En ropa de cama también emplea tejidos lisos, sin estampados y en tonos neutros.
  • Y, por último, los Objetos decorativos: Selecciónalos cuidadosamente. Evita ornamentos y detalles innecesarios, reduce al máximo los objetos decorativos, úsalos solo de forma estratégica como parte del todo de tu diseño, también coloca plantas de forma moderada para añadir vida sin sobrecargar el espacio. Te aconsejo que utilices, únicamente, elementos decorativos que añadan interés visual, y que al colocarlos te valgas de la simetría y del equilibrio.  Puedes optar por organizarlos en grupos de tres cuando sean varios o mezclar cuidadosamente objetos de diferentes materiales para darles movimiento

Ahora, teniendo en cuenta estos consejos, podrás diseñar tus espacios de forma tal que reflejen el equilibrio, la limpieza, el orden, la luminosidad y la elegancia del estilo Minimalista, y podrás gozar de un ambiente lleno de armonía en el que todos querrán permanecer.

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